Ir a comer a un restaurante se supone debe de ser una experiencia agradable, vaya uno no va a sufrir. Qué tan agradable es la experiencia? depende de la promesa de cada lugar. Todo restuaurante tiene una promesa que hace al cliente, que tiene que ver con distintas cosas, desde la calidad de la comida, la rapidéz, la conveniencia, el precio, el lugar, etc…

Lo más importante en un restaurante es y siempre será la comida, si ésta no es buena, pasan a tener menor importancia el resto de los elementos en juego, como el servicio, ambientación, localización, conveniencia, precio y cualquier otro que quieras pensar.

Más restaurantes de los que quisiera pensar lo primero que descuidan es la calidad de su comida, algunos desde el principio de manera intencional.

Los restaurantes que perduran es por la sencilla razón que la comida siempre ha estado poca madre y siempre lo estará, lo que sea que eso signifique para cada restaurante, desde tacos de carrito hasta el más sofisticado restaurante en el lugar más popis de la ciudad más odiosa del mundo.

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